IB Group, distribuidor en México de marcas como Champion, Hurley, Express y London Fog, modificó su esquema de manufactura y cadena de suministro tras el incremento de impuestos a textiles y calzado provenientes de China. Según información publicada por Expansión, la compañía reubicó la mayor parte de su producción en Vietnam para proteger márgenes y asegurar inventarios estables.
Eduardo Castellanos, director de operaciones y cadena de suministro de IB Group, explicó que los ajustes en la política arancelaria afectaron directamente la rentabilidad de las importaciones de calzado.“Traíamos mucha producción de China, pero cuando se aplicó el primer incremento de aranceles decidimos movernos a Vietnam, buscando la preferencia arancelaria”, señaló al medio local.
Vale mencionar que el cambio responde al decreto de abril de 2024, que estableció aranceles temporales de entre un 5 % y 50 % para productos procedentes de países sin tratados comerciales con México. Entre los más afectados estuvieron los artículos textiles y de calzado, gravados con un impuesto de 35 % y cuotas compensatorias adicionales aplicables durante cinco años.Actualmente, el 75 % del calzado y la ropa que comercializa IB Group se fabrica en Vietnam y el resto en México. La medida ha permitido mantener costos competitivos, mejorar márgenes y garantizar entregas puntuales a clientes como Liverpool, Sears, Sam’s Club, Palacio de Hierro, Coppel y City Club.Castellanos subrayó que la empresa trabaja con calendarios de preventa que pueden extenderse hasta 18 meses antes de cada temporada. Este esquema permite ajustar la producción a las necesidades específicas de cada socio comercial y evitar excesos de inventario.El directivo agregó que la planeación anticipada también resulta clave para temporadas de alta demanda, como El Buen Fin, donde la puntualidad en la entrega es esencial.“La optimización de tiempos en la cadena debe ser perfecta para cumplir con los clientes en tiempo y forma”, destacó.Con oficinas operativas en Shanghái y Vietnam, IB Group busca consolidar una red de proveedores certificados en Asia y mantener su competitividad en el mercado mexicano.Aunque la empresa espera un repunte durante las ventas de fin de año, Castellanos advirtió que persisten los desafíos en el consumo, con remanentes que podrían liquidarse a inicios de 2026.
